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El «museo» universitario de la Anunciación

La Universidad de Sevilla se ha marcado el reto de devolverle su antiguo esplendor y de musealizar su colección artística

G. LOBATO

p. garcía

La conservadora del Patrimonio Artístico de la Universidad de Sevilla, la profesora de Bellas Artes María Fernanda Morón de Castro, ya era consciente de la ingente tarea a la que se enfrentaba cuando hace dos años tomaba posesión de su nuevo cargo. Con más de cuatro mil piezas , contabilizando sólo las de carácter artístico, se halló ante un conjunto de bienes comparable en calidad y cantidad a la de alguno de los grandes museos internacionales, lo que le ha llevado a asumir, junto a su equipo, funciones asimilables a los protocolos de actuación de los conservadores de las pinacotecas públicas .

Durante todo este tiempo, uno de sus grandes retos personales ha sido la iglesia de la Anunciación, de un extraordinario valor patrimonial y con serios problemas desde el punto de vista de su conservación, que urgen una pronta intervención en muchos de sus elementos arquitectónicos.

Mal estado de conservación

Junto a la propuesta de rehabilitación de las cubiertas, la conservadora apunta, además, fracturas en la bóveda y el mal estado que presentan las pinturas murales del templo tras las últimas lluvias. Mientras se formalizan los permisos administrativos pertinentes — este inmueble está considerado Bien de Interés Cultural — y su correspondiente financiación universitaria, se sigue trabajando en otra labor no menos ardua y compleja como la de la reorganización de sus colecciones, con la finalidad de devolverle a esta iglesia «su antiguo esplendor». Y es que, para Morón de Castro, la Anunciación ha tenido «una historia muy desgraciada ya que, por diversas causas, se la ha ido desvistiendo de sus importantes tesoros artísticos que, ahora, estamos intentando que vuelvan a su lugar ». Por el momento, las labores de inventario y catalogación han logrado recuperar un 90 por ciento de las piezas que se hallaban dispersas en distintas dependencias universitarias. «Cuando, hacia los años 60, el Rectorado pasó de Laraña a la Fábrica de Tabacos salieron un buen número de obras para su decoración», relata la conservadora del Patrimonio Artístico de la Hispalense, quien destaca, entre el material que ha vuelto a su destino, dos cuadros que se hallaban en Madrid de pintores del XVII y uno de ellos copia de un lienzo de Rubens. Del mismo modo, cita una «Eucaristía» de Juan del Castillo, que se encontraba en el antiguo Decanato de Derecho, así como una serie de relicarios que estaban en la capilla universitaria. Hay obras, no obstante, cuya recuperación revestiría una mayor complejidad como la de dos sepulcros de la familia de los Enríquez de Rivera , de los que Morón de Castro lamenta que «fueron cedidos por la Universidad para colocarlos en su ubicación original en el monasterio de la Cartuja y no ha sido así, ya que no se emplazaron en la capilla ».

La exposición de todo el legado que la Anunciación llegó a albergar en su día, es uno de los propósitos del plan que viene desplegándose en este inmueble, para el que se contemplan actuaciones en sus retablos, lienzos, mejoras en la iluminación y en la identificación de las obras, complementadas con folletos informativos, « a modo de sala de museo universitario , compatible con las horas de culto y las actividades de la Hermandad del Valle, que siempre nos ha prestado su colaboración».

Exposición a fines de enero

Algunas de las piezas escultóricas más relevantes de esta iglesia han formado parte en los últimos tiempos de destacadas exposiciones fuera de nuestras fronteras. Es el caso de un «San Ignacio», de Martínez Montañés, y de un «San Francisco de Borja» y una «Inmaculada», atribuidas al mismo autor, cuyas restauraciones fueron sufragadas en parte por los museos que las han acogido, como la National Gallery de Londres y la de Washington, así como el Museo de Indianápolis, que financió la restauración de un « Busto-Relicario de San Francisco Javier », de Juan de Mesa.

Las obras citadas formarán parte de una muestra que, se prevé, abrirá sus puertas a finales de este mes en la sala de la Hermandad de los Estudiantes, y en la que también podrán contemplarse otras piezas que no pertenecen a la Anunciación pero que han sido objeto de reciente restauración como un Niño Jesús, de Juan de Mesa, «regalo que en su momento realizó a la Universidad un profesor de la Facultad de Bellas Artes », y un grupo escultórico —«procedente, probablemente, del Palacio de San Telmo y perteneciente a la Capilla universitaria»— compuesto por las imágenes de San Joaquín, Santa Ana y la Virgen niña. Todas ellas darán contenido a una primera muestra de conservación de patrimonio titulada «Obras maestras de imaginería polícroma».

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